El mundo de la fotografía despide a uno de sus gigantes: Sebastião Salgado falleció el 23 de mayo de 2025 en París, a los 81 años, debido a una leucemia derivada de una malaria contraída en 2010 durante su proyecto "Génesis". Su partida deja un vacío inmenso en el fotoperiodismo, pero su legado permanece vivo en cada imagen que capturó.
De economista a fotógrafo del alma humana
Nacido en Aimorés, Brasil, en 1944, Salgado se formó como economista y trabajó para la Organización Internacional del Café. Sin embargo, un viaje a África en los años 70 cambió su destino: al tomar una cámara prestada de su esposa, Lélia Wanick, descubrió su verdadera vocación. A partir de entonces, dedicó su vida a documentar la condición humana y la naturaleza con una sensibilidad única.
Una obra que trasciende fronteras
Salgado viajó a más de 130 países, capturando imágenes que narran historias de migración, trabajo, pobreza y resiliencia. Sus proyectos más destacados incluyen:
- "Trabajadores" (1993): Un homenaje a la labor humana en condiciones extremas.
- "Éxodos" (2000): Un retrato de los desplazamientos masivos y las crisis humanitarias.
- "Génesis" (2013): Una exploración de paisajes vírgenes y culturas ancestrales.
- "Amazônia" (2021): Una celebración de la biodiversidad y las comunidades indígenas del Amazonas.
Su estilo en blanco y negro, con un uso magistral de la luz y la composición, otorga a sus fotografías una profundidad emocional que trasciende lo visual.
Compromiso con el medio ambiente
Junto a su esposa, fundó en 1998 el Instituto Terra, una organización dedicada a la reforestación de la Mata Atlántica en Brasil. Hasta la fecha, han plantado más de 4 millones de árboles, restaurando ecosistemas y promoviendo la educación ambiental.
Reconocimientos y legado
Salgado recibió numerosos premios, incluyendo el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 1998 y siete galardones de World Press Photo. Fue miembro de la Academia de Bellas Artes de Francia desde 2016. Su vida y obra fueron retratadas en el documental "La sal de la Tierra" (2014), dirigido por Wim Wenders y su hijo Juliano Ribeiro Salgado.
Una mirada que perdura
Sebastião Salgado no solo fotografió el mundo; lo interpretó con una empatía y una profundidad que invitan a la reflexión. Su legado es una llamada a la conciencia, un recordatorio de la belleza y la fragilidad de nuestro planeta y de la dignidad inherente a cada ser humano.
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